Entradas

Mostrando entradas de diciembre, 2010

Libre te quiero

Libre te quiero, como arroyo que brinca de peña en peña. Pero no mía. Grande te quiero, como monte preñado de primavera. Pero no mía. Buena te quiero, como pan que no sabe su masa buena. Pero no mía. Alta te quiero, como chopo que en el cielo se despereza. Pero no mía. Blanca te quiero, como flor de azahares sobre la tierra. Pero no mía. Pero no mía ni de Dios ni de nadie ni tuya siquiera. Agustín García Calvo

Extracto capítulo VI

—¿Y ésas son...? —preguntó lord Henry mientras se servía un poco de ensalada. —Pues tus teorías sobre la vida, tus teorías sobre el amor, tus teorías sobre el placer. En realidad todas tus teorías, Harry. —El placer es lo único que tiene algún valor para hacer una teoría sobre él  — contestó Harry con su voz lenta y melodiosa — . Pero me temo que no puedo proclamar mi teoría como mía propia. Pertenece a la naturaleza, no a mí. El placer es el examen de la naturaleza, su signo de aprobación. Cuando somos felices somos buenos, pero cuando somos buenos no siempre somos felices. —¡Ah! ¿Pero, qué quieres decir con bueno?  — exclamó Basil Hallward. —Sí  — repitió Dorian, echándose para atrás en la silla y mirando a lord Henry por entre espesos ramos de lirios púrpuras que estaban colocados en el centro de la mesa — , ¿qué quieres decir con bueno, Harry? —Ser bueno es estar en armonía con uno mismo  — replicó tocando el fino borde de su vaso con sus dedos pálidos y delgados — . La d

Extracto capítulo IX

—Alto, Basil! ¡No te escucharé!  — gritó Dorian poniéndose en pie de un salto — . No tienes que decirme nada. Lo que está hecho, hecho está. Lo que es pasado es pasado. —¿Llamas pasado al día de ayer? —¿Qué tiene que ver con eso el verdadero paso del tiempo? Sólo la gente superficial que necesita años para deshacerse de una emoción. Un hombre que es maestro de sí mismo puede terminar una pena con tanta facilidad como puede inventar un placer. No quiero estar a merced de mis emociones. Quiero utilizarlas, reírme de ellas y dominarlas. [El retrato de Dorian Gray] Oscar Wilde .

Poniendo y quitando

Esperaba el autobús, llovía. Por fin llegó, subí la escalera, sólo quería sentarme donde fuera; pagué y me senté mientras llegaba a mi parada, no imaginaba que no me iría aunque me bajara. Miré a mi lado, ¡hostia! allí estaba ese ángel en el autobús que se levantaba. Por primera vez me alegré de no tener carnet , y la polla se me puso más dura que la pared. Que hermoso fue mirarme en esos ojos orgullosos, buscar un nexo, verla bajar andando como el sexo volviendo la cabeza hacia donde me sentaba mientras se me gravaba cada rasgo de su cara. Es verdad, pueden tomarte el corazón como rehén, matarlo también, fingiendo que no te ven. Se puede ser del sur y haber perdido el norte, hacer que nadie te soporte por no haber tenido un golpe, Y eso que nunca pensé en escribir sobre estas cosas , pero lo hice. Nunca pensé en regalar rosas . Solamente recuerdo dejar palabras verdaderas que no puedo respaldar con dinero en la cartera. ¿Lo recibes?, esto es la misma onda. Cambia

¿Te ríes?...

Yo sé cuál el objeto de tus suspiros es; yo conozco la causa de tu dulce secreta languidez. ¿Te ríes?... Algún día sabrás, niña, por qué. Tú acaso lo sospechas, y yo lo sé. Yo sé cuándo tú sueñas, y lo que en sueños ves; como en un libro, puedo lo que callas en tu frente leer. ¿Te ríes?... Algún día sabrás, niña, por qué. Tú acaso lo sospechas, y yo lo sé. Yo sé por qué sonríes y lloras a la vez; yo penetro en los senos misteriosos de tu alma de mujer. ¿Te ríes? ... Algún día sabrás, niña, por qué; mientras tú sientes mucho y nada sabes, yo, que no siento ya, todo lo sé. Gustavo Adolfo Bécquer

Muere lentamente

Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, quien no oye música quien no encuentra gracia en sí mismo. Muere lentamente quien destruye su amor propio, quien no se deja ayudar. Muere lentamente quien se transforma en esclavo del hábito repitiendo todos los días los mismos trayectos, quien no cambia de marca, no se atreve a cambiar el color de su vestimenta o bien no conversa con quien no conoce. Muere lentamente quien evita una pasión y su remolino de emociones, justamente éstas que regresan el brillo a los ojos y restauran los corazones destrozados. Muere lentamente quien no gira el volante cuando está infeliz con su trabajo, o su amor, quien no arriesga lo cierto ni lo incierto para ir atrás de un sueño quien no se permite, ni siquiera una vez en su vida, huir de los consejos sensatos... ¡Vive hoy! ¡Arriesga hoy! ¡Hazlo hoy! ¡No te dejes morir lentamente! ¡No te impidas ser feliz! Pablo Neruda

Rostro de vos

Tengo una soledad tan concurrida tan llena de nostalgias y de rostros de vos de adioses hace tiempo y besos bienvenidos de primeras de cambio y de último vagón. Tengo una soledad tan concurrida que puedo organizarla como una procesión por colores tamaños y promesas por época por tacto y por sabor. Sin un temblor de más, me abrazo a tus ausencias que asisten y me asisten con mi rostro de vos. Estoy lleno de sombras de noches y deseos de risas y de alguna maldición. Mis huéspedes concurren , concurren como sueños con sus rencores nuevos su falta de candor . Yo les pongo una escoba tras la puerta porque quiero estar solo con mi rostro de vos. Pero el rostro de vos mira a otra parte con sus ojos de amor que ya no aman como víveres que buscan a su hambre miran y miran y apagan mi jornada. Las paredes se van queda la noche las nostalgias se van no queda nada. Ya mi rostro de vos cierra los ojos y es una soledad tan desolada. Mario Be